‘Echo’: la nueva serie de Disney+ que intenta arreglar el caos de Marvel
Echo es la nueva serie de Disney + que intenta arreglar el caos que es Marvel. Hoy por hoy hay sobrecarga de superhéroes. Es bien sabida la crisis por la que está pasando Marvel Studios, y todo porque han abusado de la cantidad antes que la calidad. Para poder disfrutar de las series y películas del Universo Cinematográfico Marvel hay que ser muy fan y haber visto todo lo anterior, lo que, cada vez más, provoca que el público se vaya descolgando. Aún con todo, Echo es una propuesta digna, madura, muy del espíritu de las series que Marvel hacía en Netflix (Dardevil o Jessica Jones), las que, por cierto, ha recuperado la compañía para continuarlas en Disney+. En Echo nos cuentan la historia de Maya López, personaje que se presentó en otra miniserie, Ojo de Halcón (2021); una mujer nativa americana, sordomuda y a la que le han amputado una pierna…
Que Marvel aprenda de los culebrones
La telenovela siempre ha sufrido el estigma de ser un género menor pero tiene una cualidad superior al resto de ficciones: están escritas para que puedas engancharte en cualquier momento y en cualquier capítulo sin necesidad de haber visto nada antes. Es verdad que para conseguirlo se peca de recursos torpes, diálogos excesivamente repetitivos y narrativa fácil, pero el caso es que funciona. A estas alturas, el UCM (Universo Cinematográfico Marvel), con tanta cantidad de series, películas y fases, debería aprender de los culebrones de toda la vida, bajar la pomposidad y ponérselo más fácil al espectador medio. Y es que, hoy por hoy, Marvel se está reduciendo al nicho de los muy entendidos y muy fans, rechazando a nuevos seguidores y cansando a otros tantos.
El díptico formado por Los Vengadores: Infinity War y Los Vengadores: Endgame supuso un fenómeno social único (la segunda es la película más taquillera de la historia) y el final (bueno, casi, Luego llegó Spiderman: Lejos de casa) de la tercera fase del UCM, una de las franquicias cinematográficas de más éxito. Hasta ese momento, todo eran películas que iban saliendo cada año, conectadas más o menos entre sí y presentando a los héroes que, al final, lucharían codo con codo en Endgame. Pero fue entonces cuando arrancó la fase cuatro y lo hizo con la primera serie de Marvel para Disney+; Bruja Escarlata y Visión (la mejor que se ha hecho hasta la fecha). A partir de ahí, ha habido saturación de series, películas y superpoderes. Además, la trama de esta nueva era, que guira en torno a los multiversos, ha resultado demasiado confusa para los no entendidos. Hay que ver demasiadas cosas para poder seguir el hilo argumental, por lo que muchos han desistido. La fría acogida que tuvo The Marvels, la última cinta estrenada en cines, demuestra que la fórmula se está agotando. Es por todo ello que, Marvel Studios ha replanteado su estrategia y, aparte de espaciar más sus proyectos desde la actual Fase 5, ha introducido el sello Spotlight, en el cual se enmarcarán títulos que no exigirán de un vasto conocimiento previo. Y la primera serie creada bajo esta batuta ha sido Echo.
La redención de los villanos
En realidad, Echo es un spin-off de Ojo de Halcón, miniserie estrenada hace dos años, por lo que sí que hay deuda narrativa. Eso se nota en el primer capítulo de esta nueva propuesta, en el que se intenta (de manera poco articulada) hacer un recopilatorio de los hechos anteriores para entrar en faena con una trama semi-independiente.
Alaqua Cox repite su papel como Maya López, alias Echo, al igual que Vincent D’Onofrio como Kingpin, uno de los grandes villanos de Marvel (en es gran enemigo de Daredevil) a quien creíamos muerto pero va a ser que no… (Y con esto no se hacen spoilers). Echo adapta el cómic del mismo nombre y versa sobre una joven nativa americana y sordomuda que pasa de ser una sicaria sedienta de venganza a una heroína con poderes. nada nuevo bajo el sol.
¿La serie es buena? No es mala. Sorprende lo dura que es teniendo en cuenta la marca que la ampara. No es demasiado sangrienta (no nos vayamos a asustar) pero no es infantil. Es un producto que va creciendo (el primer episodio es casi infumable pero mejora a partir del segundo) y que cuenta con un trasfondo emocional interesante (la historia de las dos primas). Un homenaje al western que tiene como principal atractivo a una Alaqua Cox como una efectiva protagonista. ¿Puede verla alguien que no sepa nada de Marvel? Sí pero se va a aburrir.